Jueves 12 de abril

– Acción pastoral-Iglesia primitiva, C. Apablaza.
– Acción pastora-hia. Iglesia, R. Castillo.
– Raíces eclesiológicas, O. Mondaca.
– Método en teología práctica, P. Concha.

a) Acción pastoral-Iglesia primitiva (C. Apablaza): Los conceptos teológicos claves son los siguientes: kerigma, liturgia, eucaristía, bautismo. Una de las acciones pastorales fundamentales y más relevantes de la acción pastoral eclesial, fue y sigue siendo el anuncio de aquella confesión de fe acerca de la muerte y resurrección de Jesús (kerigma). Por otra parte, la liturgia corresponde a un momento o característica de la acción pastoral eclesial que a todas luces resulta de primordial importancia: la vivencia en comunidad de la fe en Jesucristo, nuestro Señor. Ahora bien, la eucaristía como sacramento instituido por el mismo Jesús en la última cena, es desde tiempos de las primeras comunidades cristianas un símbolo de verdadera comunión con Cristo glorificado. Por último, el bautismo conserva hasta hoy el sentido que tuvo ya en sus orígenes: ser gesto fundamental de entrada a la comunidad de creyentes. No obstante, hoy por hoy la acción evangelizadora de la Iglesia no concluye en dicho gesto en antaño. Sino que marca el inicio de la vida pastoral del creyente.

b) Acción pastoral-hia. de la Iglesia (R. Castillo): Los conceptos teológicos claves son los siguientes: anuncio, ministerio, agentes. El anuncio, es la primera tarea pastoral de la Iglesia, que se remonta a las primeras comunidades primitivas. De esta manera, en la actual práctica pastoral eclesial, el anuncio del misterio de Cristo y su celebración cultual, al igual que en orígenes del cristianismo tiene un papel fundamental. Por otra parte, los distintos ministerios o servicios que la Iglesia presta en la comunidad donde se encuentra inserta, son desde los comienzos de su acción pastoral un elemento insoslayable. Por último, los distintos servicios o ministerios desempeñados por la Iglesia, en el transcurso de su historia han sido llevados a cabo por diferentes agentes pastorales, dependiendo del período de tiempo en el cual se encuentre situada y de las diferentes características socio-culturales de la época.

c) Raíces eclesiológicas (O. Mondaca):
Los conceptos teológicos claves son los siguientes: Vaticano II, Cristo y sacramento. En relación a la realidad de Cristo, del reino y del mundo es que el concilio Vaticano II, determina la razón de ser de la Iglesia y su acción pastoral. De esta manera, la esencia de la Iglesia es especificada en su ser relativo a las realidades a las que ésta debe servir. Por otra parte, podemos decir que misterio de la Iglesia forma parte del misterio de la encarnación, de modo tal que es posible afirmar que dentro del misterio de Cristo, se encuentra el misterio eclesial y por consiguiente, dentro de la fe en Cristo se halla la fe en la Iglesia. Por último, la realidad de la Iglesia es explicada mediante la categoría de sacramento, afirmando que ésta no es Cristo, sino sacramento de Él, estando además encargada de llevar a cabo la misión que este la ha encomendado; misión que desde la perspectiva conciliar determinada el ser de la Iglesia.

d) Método en teología práctica (P. Concha):
Los conceptos teológicos claves son los siguientes: método teológico y método En relación al primer concepto, podemos decir que al ser la teología una teoría, es decir, un discurso reflexivo y crítico requiere el seguimiento de un método o sistema de pensamiento orientador del que hacer teológico. Ahora bien, cualquiera que sea dicho método, debe estar constituido de cuatro dimensiones transversales cualquiera que sea éste. Estas dimensiones son cuatro: Dimensión bíblica, Dimensión histórica, Dimensión sistemática, Dimensión práctica. No obstante, este discurso guarda relación con la praxis social y eclesial, siendo ante todo la interpretación de la situación humana actual, por medio de la fe y el evangelio. De esta manera, existen diferentes métodos en teología práctica, como por ejemplo: el Método inductivo de la revisión de la vida y el Método empírico y crítico.

Jueves 19 de abril

– Criterios de Acción pastoral (H. Gutiérrez):
– Concepciones de la teología práctica (Montiel A.):
– Teología de la praxis (Navarro R.):
– Acción pastoral y reflexión teológica (Saldaña P.):

a) Criterios de Acción pastoral (H. Gutiérrez): Considero que los conceptos teológicos claves son los siguientes: acción pastoral, Iglesia, estructura teándrica, sacramento de salvación. En relación al primer concepto podemos decir que toda acción pastoral, tiene como origen y fin a “Dios”; en el sentido de que continúa la tarea encomendada por Él a Cristo, a saber: la realización de una mediación sacramental de la salvación otorgada a la humanidad en el misterio pascual; en relación al segundo concepto, es importante, ya que detrás de toda acción pastoral, existe una forma de comprenderse la Iglesia a sí misma. Los últimos dos conceptos, guardan relación con dos criterios de acción pastoral que brotan de la continuidad de la Iglesia, en relación a la misión de Cristo y que traen de suyo, dos modos de comprenderse a sí misma la Iglesia. El primer guarda relación con el hecho de que la Iglesia se considera a sí misma, en su acción pastoral como una mezcla de la acción divina y humana; al igual como se encuentran unidas ambas naturalezas en la persona de Jesucristo. El segundo por su parte, apunta al hecho de que la Iglesia se considera a sí misma como sacramento de salvación, es decir, como un signo cualificado que muestra una realidad superior a Él: la salvación de otorgada por Dios Padre, a través, de Jesucristo, su Unigénito.

b) Concepciones de la teología práctica (Montiel A.): Considero que los conceptos teológicos claves son los siguientes: disciplina teológica y teología de la liberación y política. El primer concepto teológico, resulta relevante, debido a que siendo la teología práctica una disciplina teológica, esta ha tenido que pasar por distintas fases para llegar a ser considerada como tal, es decir, como una reflexión sobre la acción de la Iglesia. Los dos últimos conceptos, resultan relevantes, debido a que la acción eclesial, posterior al concilio vaticano II, ha considerado su acción pastoral, eminentemente como un sacramento cotidiano de salvación al servicio de la caridad; intentando de esta manera, incorporar a la reflexión teológica el aspecto social y político; como una respuesta a las situaciones carenciales más urgentes de los grupos más necesitados de nuestra sociedad, mediante un mensaje de liberación.

c) Teología de la praxis (Navarro R.): Considero, que el concepto teológico clave del texto guarda relación con la ortopraxis, entendida como el modo correcto de actuar de la Iglesia; de la cual depende la ortodoxia o recto hablar de la misma. En este sentido, es recalcada la importancia de una praxis liberadora de las personas y del mundo; que sea capaz de promover una actuación recta de los cristianos y de la Iglesia. En este sentido, la praxis eclesial, es entendida como un movimiento crítico, generador de un cambio en las estructuras sociales, de modo que sea capaz de realizarse una renovación del sistema social, junto con una emancipación personal. Por último, debemos convenir, en que la acción pastoral de la Iglesia, consiste en una práctica actualizadora de la praxis salvífica, llevada a cabo por Jesús, mediante la Iglesia y los fieles laicos.

d) Acción pastoral y reflexión teológica (Saldaña P.): Considero, que los conceptos teológicos centrales del texto, son los siguientes: Vida cristiana, reflexión teológica. Dos conceptos que se encuentran muy entre lazados, debido a tener un origen común: la fe. De esta manera, la vida cristiana, da lugar a la función pastoral y la reflexión teológica por su parte, origina la función teológica. De este modo, la acción pastoral es una actualización de la praxis de Jesús, llevada a cabo por la totalidad de los cristianos y de la Iglesia; con miras a la implantación del Reinado de Dios en el mundo. Por otra parte, el objetivo de la reflexión teológica es la historia de la salvación, cuya cumbre es recordada en el memorial eucarístico; siendo su capitulo último: la parusía; anticipada en los signos caritativos y sacramentales. Cabe destacar que toda reflexión teológica, necesita como punto de referente la realidad de la vida cristiana para no convertirse en mera metafísica religiosa, desligada de la vida cotidiana del creyente

Jueves 26 de abril

– Acciones pastorales (I. Hinostroza):
– Pastoral de conjunto (I. Donoso):
– Programación pastoral (G. Hernández):
– Unidad y pluralidad pastoral (E. Martínez):

a) Acciones pastorales (I. Hinostroza):

b) Pastoral de conjunto (I. Donoso):Una acción pastoral planificada: Esta es precisamente la definición de una pastoral de conjunto, la cual se encuentra en estrecha relación con la Iglesia local, diocesana y particular. En este sentido, la pastoral de conjunto consiste en ser un esfuerzo por coordinar y dirigir a toda la Iglesia bajo la autoridad del obispo; siendo connatural a una pastoral de conjunto la preocupación por que en ella exista una participación activa en todos los niveles de las comunidades y las personas interesadas, para así educarlas en metodologías que les permitan efectuar un análisis de la realidad y posterior reflexión de la misma, a la luz del evangelio. Por último, cabe señalar que una pastoral de conjunto, trae de suyo, una serie de estructuras básicas propias de toda planificación pastoral: Nivel diocesano; el infradiocesano y el supradiocesano.

c) Programación pastoral (G. Hernández): Una programación en el ámbito pastoral, consiste en organizar todos los elementos pastorales para lograr los fines que la Iglesia persigue. En este sentido, la programación es una especie de proyecto, en el cual se buscan o se persiguen determinados fines. Para esto se utiliza una metodología, la cual consta de un momento reflexivo (teología pastoral) y un momento activo (pastoral aplicada). Es posible distinguir dos tipos de programación pastoral, que responde a dos formas de concebirse a sí misma la Iglesia. Por una parte, la pastoral tradicional: esta pastoral corresponde a la concepción Tradicional de Iglesia, en la cual los religiosos y Sacerdotes son el centro de la acción y lo laicos sólo los depositarios de la misma. Hay aquí un esquema piramidal en la cuál no todo el pueblo de Dios se encuentra al mismo nivel. Por otra parte, la pastoral post-conciliar, responde a una visión eclesiológica, en la cuál, la Iglesia hace presente su dimensión comunitaria y en donde, todos los bautizados son responsables de la acción Evangelizadora y, por ende, de la acción pastoral.

d) Unidad y pluralidad pastoral (E. Martínez): A mi juicio, los conceptos centrales para la comprensión del texto son: pluralidad y secularización. La razón de esto, es debido al hecho de que de la mano del proceso de secularización de la sociedad moderna, en donde la cosmovisión religiosa ya no es dominante y mucho menos la única, viene un creciente proceso de pluralismo, caracterizado por la coexistencia de diversos elementos sociales o culturales que no poseen un criterio que los unifique. En este sentido, es posible afirmar que la sociedad moderna y pluralista, interviene dentro del pensamiento eclesial, provocando la multiplicación de la pluralidad teológica y pastoral, hecho que debe ser considerado como algo bueno por los cristianos, ya que es, a través, de esta pluralidad que podemos alcanzar la verdad del cristianismo a la luz de nuestra realidad.

Jueves 3 de abril:

– Comunidad Cristiana. (C. Gutiérrez):
– Comunidad Eclesial. (M.F. Ortega):
– Modelos de Iglesia y de Acción Pastoral (M. Navarro):
– Cuatro modelos de acción pastoral (A. Quezada):

a) Comunidad Cristiana. (C. Gutiérrez): La formación de comunidades cristianas surge, después del Concilio Vaticano II como una remodelación de la Iglesia en sus bases laicales y populares. Este fenómeno comunitario cristiano post conciliar, obedece según Casiano Floristan, a cuatro exigencias: 1) vivir una fe grupal; 2) compartir servicios y ministerios; 3) la transformación de espacios concretos de la sociedad y 4) testimoniar una esperanza de vida y resurrección. Este tipo de comunidades, se denominan: comunidades de base, comunidades cristianas de base o comunidades eclesiales de base. Es posible definir la comunidad cristiana como: “un grupo de creyentes que busca una vida fraternal, abrasados en la fe, que celebran una liturgia propia y viven el compromiso con el mundo en una actitud evangelizadora”.

b) Comunidad Eclesial. (M.F. Ortega): El Concilio Vaticano II, comprendió la realidad eclesial, como una comunión en la fe, esperanza y caridad. De esta manera, la importancia de la comunión eclesial radica en el hecho de que La Iglesia corresponde a un misterio de comunión; de los hombres con Dios y de estos entre sí; de este modo, la comunión eclesial es signo de un vínculo, entre el hombre y Dios. Existen tres notas características en una teología de la comunión eclesial, a saber: Dios esta en la comunión; La comunión es con Cristo; La Iglesia es Comunión. Por otra parte, existen seis criterios reguladores de toda comunión eclesial: es una Comunión de fe; sacramental; fraternal; de bienes; jerárquica e íntereclesial.

c) Modelos de Iglesia y de Acción Pastoral (M. Navarro): A lo largo de su historia, la Iglesia, ha sido representada con numerosas imágenes. En este sentido, el Concilio Vaticano II, se refiere a estas imágenes como “figuras” o “símbolos” que revelan la naturaleza de la Iglesia (LG 6). Es así como las imágenes de “pueblo de Dios”, “sacramento de salvación” y “comunidad de creyentes” son figuras que recuperan el sentido primitivo de la comunión eclesial o koinonía. En relación a esto, A. Dulles señala que: “cuando una imagen es empleada de un modo reflexivo y crítico para profundizar en el entendimiento teórico de una realidad para a ser lo que hoy se llama un modelo.” En este sentido, la acción pastoral modelo es un proyecto operativo o plan concreto de actuación que relaciona dinámicamente todas las tareas que intervienen en el proceso de la praxis. Existen a los menos tres modelos eclesiológico-pastorales: 1) Pastoral de cristiandad- pastoral misionera; de Evangelización- sacramentalización; 3) Iglesia “gran institución” y “red de comunidades”.

d) Cuatro modelos de acción pastoral (A.Quezada): Los modelos de acción pastoral son maneras distintas que utiliza la Iglesia para ordenar y orientar sus acciones pastorales, adaptándose a la realidad de cada época. El “modelo tradicional”, responde a la situación de un mundo sociológicamente cristiano. Sus ideas eclesiològicas básicas corresponden a una imagen de Iglesia como sociedad perfecta y su autocomprensión corresponde a la clásica figura piramidal. Por otro lado, su planteamiento pastoral se centra en la parte espiritual del hombre, y su acción pastoral la realizan los sacerdotes y es recibida pasivamente por los laicos. El “modelo comunitario”, posee dos ideas eclesiológicas básicas: la Iglesia como misterio de comunión y como Pueblo de Dios que hace a todos partícipes de la misión como agentes de la vida pastoral. El “modelo evangelizador”, quiere reunir en la transmisión del evangelio todos los demás elementos de la vida y de la acción eclesial y pastoral. Sus ideas eclesiològicas básicas son dos: La misión como autentificación de la comunión, y la sacramentalidad de la Iglesia que la hace significativa para el mundo y eficaz en él. Su planteamiento pastoral se centra en la preocupación evangelizadora de la Iglesia como: servicio evangelizador, comunión evangelizadora, liturgia evangelizadora. Por último, el “modelo liberador” es sectorial y se fija en un campo concreto de la pastoral de la Iglesia y, desde él, quiere reunir todos los elementos pastorales; sus ideas eclesiológicas básicas son: La concepción sacramental de la eclesiología, la distinción clara entre Iglesia y Reino, y el diálogo con el mundo tal y como lo describe la constitución pastoral Gaudium et Spes y la doctrina social de la Iglesia y su planteamiento pastoral, se centra en una preocupación por la situación social destinada a la evangelización y su transformación.


Jueves 10 de mayo

– Laicos Cristianos (A. Flores):

– Agentes de acción pastoral (P. Moyano):

– Ministerio Eclesial (B. Quezada):

a) Laicos Cristianos (A. Flores): El término “laico”, significa en griego “pueblo” y designa a una categoría distinta a la de los jefes. Ahora bien, el Vaticano II, aceptó y consagró la teología del laicado, y da por fin una definición de laicos: “los fieles cristianos que, por estar incorporados a Cristo mediante el bautismo, constituidos en Pueblo de Dios y hechos participes, a su manera de la función sacerdotal, profética y real de Jesucristo, ejercen, por su parte, la misión de todo el pueblo cristiano en la Iglesia y en el mundo” (LG 31). Aquí se describe al laico en tres relaciones: con Cristo: según la cual, el laico bautizado participa en el sacerdocio de cristo con la Iglesia: los laicos Participan en la función profética, sacerdotal y real de Cristo y con el mundo: según la cual, el carácter secular es propio y particular de los laicos. Por último, hay que decir que la teología del laicado se ha demostrado insuficiente y por ello, se a propuesto renunciar al termino laico, ya que solo se entiende negativamente como el de no clérigo, y llamarlos bautizados, cristianos o fiel cristiano, por que así se tiene en cuenta a todo el pueblo de Dios.

b)Agentes de acción pastoral (P. Moyano): La programación pastoral y su realización conjunta, necesita como hemos visto, de agentes pastorales que la lleven a cabo. Los diferentes “agentes pastorales” pertenecientes a la Iglesia católica son: Laicos; religiosos y el ministerio ordenado. Los laicos, en la Iglesia no representan una categoría menor de cristianos, ya que todos estos son incorporados a ella, mediante el “bautismo”. En este sentido a los laicos, les es encomendada la misión gestionar los asuntos temporales y ordenarlos según el designio de Dios, a través, del ejercicio de su profesión o trabajo civil. Por su parte, los religiosos, llamados a poseer un don particular en la vida de la Iglesia para que contribuyan a su misión salvífica. Por último, los sacerdotes y diáconos ordenados, su importancia para la acción pastoral de la Iglesia, siempre ha sido decisiva, ya que su ministerio está en función de la edificación de la Iglesia local. Hay que señalar que el origen del ministerio ordenado, radica en los apóstoles y en los «setenta» designados por Cristo para llevar sus enseñanzas «en cada ciudad y en cada lugar» (Lc. 10,1).

c) Ministerio Eclesial (B. Quezada): El “ministerio eclesial”, aparece como un término general, el cual es un tipo de servicio que pasa a ser ministerio cuando la personas recibe un encargo duradero y jurídico. En las comunidades primitivas, se entiende como la tarea encomendada a los creyentes en aras de la expansión misionera, crecimiento de la fe, desarrollo comunitario eclesial y promoción y liberación humana. En un comienzo cualquier persona podía ejercer un ministerio cristiano, pero sólo los varones llegaban a ser diáconos, presbíteros u obispos. En el NT no se describe la categoría de sacerdocio ni se distingue claramente las diferencias entre episcopado y presbiterado, sino que da importancia a las cualidades que posee cada persona como dones gratuitos de Dios, puestos al servicio de la comunidad . Ahora bien, El contenido del ministerio precede a la persona en cargada del mismo; en este sentido, es que decimos que no se debe pensar en función de una persona, sino en el anuncio del evangelio como buen noticia y la edificación de la Iglesia como sacramento del Reino. en relación a esto, el Concilio Vaticano II dice que la iglesia es el pueblo de Dios, en cuyo interior y a cuyo servicios están todos los ministros


Jueves 17 de mayo

– Acción misionera (L. Acuña):
– Diálogo con el mundo (J. Benavides):
– Evangelización (C. Reyes):
– Pastoral litúrgica (S. Acevedo):

a) Acción misionera (L. Acuña): La misión es la primera acción en la que se basa la evangelización. Esta es comprendida como todo lo que puede ser transformado por la acción salvífica del Evangelio. Por otra parte, la falta de testimonio cristiano es una de las grandes dificultades de tipo histórico que se le presentan a la misión. Además, podemos mencionar una sobrevalorización de lo empírico y técnico, el proceso de secularización y de fragmentación cultural, dentro de los grandes obstáculos culturales que se le presenta a la acción misionera de la Iglesia. De esta manera, el llamado de la Iglesia es a asumir la cultura del mundo e intentar purificarla por medio del Evangelio.


b) Diálogo con el mundo (J. Benavides):
El Concilio Vaticano II, traza el tránsito desde una situación en la que parecía haberse alcanzado un máximo de cristianización y cuya conservación y afianzamiento se consideraba como la tarea más importante, a otra situación en la que hay reconocer de nuevo la radical postura minoritaria de los cristiano, de modo que lo primario no es la conservación, sino la existencia misionera. De esta manera, el Concilio Vaticano II hace que el cristiano tome conciencia de lo expuesta que está su existencia en medio de un mundo no cristiano: y le anima a apoyarse en Cristo e imitarlo, para así ir en mundo lleno de confianza y poder cumplir en él su servicio.

c) Evangelización (C. Reyes): La acción evangelizadora es de vital importancia en la Iglesia. Ahora bien, esta acción corresponde al eje de la misión de la Iglesia en todos sus ámbitos, ya que gracias a la evangelización, la Iglesia puede entrar en diálogo con el mundo. Con el Concilio Vaticano II, la Iglesia se refiere a su comunión como misión evangelizadora, consistente en: el anuncio, diálogo y servicio en pos de la humanidad. Por otra parte, la noción de evangelización, guarda relación con un continuar la misión de Cristo, la cual es traer la buena noticia del Reino a todos los hombres y de trasformar este mundo; de esta manera, la evangelización es considerada comoun proceso total mediante el que la Iglesia anuncia al mundo el evangelio del Reino de Dios y da testimonio entre los hombres de una nueva manera de ser y vivir.

d) Pastoral litúrgica (S. Acevedo): La Pastoral Litúrgica se vive por la salvación acontecida en el Ministerio Pascual, es una realidad en la Iglesia que lo recuerda y conmemora gracias a la presencia y acción del Espíritu del Resucitado. De esta manera, la acción litúrgica es una actualización de la nueva alianza del Ministerio Pascual en la Iglesia. La acción litúrgica, es una etapa pastoral caracterizada por la misión compartida de la Iglesia y por la opción personal por el evangelio sellada en el bautismo y la confirmación, por ello es que No debe darse ninguna acción litúrgica sin su catequesis precedente, es decir, antes de la acción debe haber una introducción a ella y a la comunidad cristiana por medio de un proceso catequético. Por último, hay que decir que es necesario que la evangelización y litúrgica encuentren un punto de equilibrio; en este sentido, el Concilio Vaticano II nos dice que los hombres para llegar a la liturgia necesitan ser antes llamados a la fe y a la conversión

Jueves 34 de mayo

– Pastoral de la palabra (Canales R.):
– Acción catecumenal (Masso J.):
– La catequesis (Olivos A. L.)
– Pastoral de la comunión (Arriagada C.):

a) Pastoral de la palabra (Canales R): La constitución Dei Verbum ha insistido en la conjunción existente entre el hecho y la palabra en la progresiva autorrevelación de Dios. La acción pastoral de la Iglesia, que continua en la historia siendo mediación de la donación de Dios, tiene la palabra como uno de los elementos que la constituye. No obstante, para hablar de la palabra en la Iglesia no es posible al margen de la Palabra con mayúscula que la misma Iglesia sustenta y hacer vivir: la revelación. La historia de la revelación es la historia de la progresiva autocomunicación de Dios al hombre; Su palabra tiene por cometido el ofrecimiento de una comunión en la que el hombre puede encontrar su última verdad, el camino de su realización humana y la salvación integral a la que él aspira. Ahora bien, en la Homilía es el lugar en el que más repetidamente la palabra de Dios, es proclama en la acción litúrgica de la Iglesia, esta posee tres dimensiones esenciales: a) Conexión con la palabra: ayuda a comprenderla; b) Conexión con el misterio: ayuda a celebrarlo y c) Conexión con el pueblo y su situación: ayuda a vivir de la palabra escuchada y del misterio celebrado.

b) Acción catecumenal (Masso J.): La acción catecumenal, corresponde a las etapas de la evangelización. Siendo las actividades catecumenales el punto medio entre las acciones misioneras y las acciones pastorales, de manera complementaria, pero nuestra realidad ha promovido alteraciones a esta acción que han determinado la vida y la pastoral de la Iglesia. Ahora bien, la acción catecumenal, se encuentra sometida a varios problemas, de origen sacramental; tales como: la celebración del bautismo de niños, que ha colocado en primer lugar del proceso lo que ha de ir como culmen; La separación entre el bautismo y la confirmación y La celebración de la primera eucaristía antes de que el proceso de iniciación se encuentre finalizado. Estos problemas no entregan una información determinante y a la vez preocupante: La iniciación termina antes de que el nuevo cristiano haya podido asumir personalmente su fe. Esto nos llama a preocuparnos por la evangelización y a no descuidar la evangelización de la propia comunidad.

c) La catequesis (Olivos A. L.): El término catequesis “proviene del verbo neotestamentario catequizar (kat-êchein) que significa hacer resonar, anunciar o proclamar. En el Nuevo Testamento, se refiere a la transmisión y recepción de la palabra del evangelio. En este sentido, la catequesis puede entenderse principalmente como la enseñanza en la fe o en la fe de los catecúmenos. En este sentido, la catequesis cumple el rol de acción misionera en las personas y principalmente en la comunidad cristiana para que se madure y se mantenga viva la fe. Esto nos lleva a pensar que “la base de la catequesis es Cristo y el evangelio.En resumen, las funciones de la catequesis en la comunidad será educar la fe para lograr la conversión inicial del cristiano y así se transforme en confesión de fe.

d) Pastoral de la comunión (Arriagada C.): La comunión es el clima y la realidad en donde se dan las acciones pastorales. Esto, porque quien se ha manifestado progresivamente a lo largo de la revelación es un Dios de comunión, que quería y quiere asociar al hombre a su mismo ministerio comulgando con él. Es así como la Iglesia se ha comprendido a sí misma como parte de este plan de salvación centrado en la comunión con el mismo misterio de Dios. Este misterio de Dios es un misterio de comunión en el amor, ya que creó al hombre y lo invitó a la comunión personal con él, con los demás hombres y con el mundo. Con esta invitación el hombre es llamado al desarrollo pleno de su ser y ha sido enviado a crearla en su entorno. Esto, porque quien vive en la comunión con Dios, lo manifiesta en la comunión con los demás. En la eclesiología post-conciliar, la noción de comunión arranca del capítulo I de la Lumen Gentium que contempla a la Iglesia a la luz de la Trinidad y compo fruto de toda la economía de la salvación. En él, la comunión es claramente don, fruto de la gracia, obra de la salvación de Cristo, plenitud del encuentro de Dios con el hombre.

ANDRÉS OLIVARES VANETTI